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¡Celebremos al agricultor dominicano!

Desde hoy celebramos a todos los hombres y mujeres que se dedican con esfuerzo y esmero al cultivo de café en República Dominicana.

¿Te imaginas la vida sin los hombres y mujeres que, con su trabajo y dedicación a través del cultivo de la tierra, hacen posible que puedas disfrutar tu rica taza de café cada mañana?

Sé que no, sería una tragedia para todos nosotros, los coffeelovers… Pero no te preocupes, es solo una pregunta para que reflexiones sobre la gran importancia del agricultor en nuestras vidas.

La agricultura es vital para la economía dominicana.

Y es que en la víspera de la celebración del Día del Agricultor este sábado 15 de mayo, en lamejorhora.com queremos rendirles honor a miles de trabajadores y trabajadoras que con su ardua labor de cultivar la tierra aportan al desarrollo integral y a la generación de riqueza de nuestra nación.

Ellos son quienes hacen que la tierra pueda parir los alimentos que consumimos cada día, lo que convierte al agricultor en un individuo vital para nuestra subsistencia.

Y en el caso del caficultor, son quienes se dedican, exclusivamente, a cultivar el café que consumimos todos los días.

El café es tan maravilloso, que su cultivo no solo le da alegría a nuestro paladar a través de una buena taza, sino que tiene un impacto ambiental muy positivo.

Beneficios de la caficultura

De acuerdo con el estudio “Sector cafetalero en República Dominicana, análisis del impacto del cambio climático”, el cultivo de café impacta positivamente en:

  • Protección de las principales cuencas hidrográficas del país.
  • Protege los suelos de la erosión.
  • Genera fuente hídrica para consumo humano, ganadería, irrigación de cultivos y generación de energía.
  • Genera cobertura de 2.05% del área boscosa.

Impacto económico del café 

Pero además de los beneficios medioambientales que genera el cultivo y producción del café, hay que resaltar que esta actividad dinamiza la economía de miles de familias del campo, mejorando sus ingresos y creando miles de empleos.

Para que entiendan un poco más de la relevancia de la caficultura, en República Dominicana hay unas 28,224 familias involucradas de manera directa en la producción de café y más de 500,000 personas dependen de él.

Estas estadísticas según lo establece el estudio antes citado, realizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), el entonces Consejo Dominicano del Café (CODOCAFÉ) y la Nordic Development Fund.

En efecto, el cultivo de café es la principal actividad de ingresos para los productores de las zonas montañosas, creando unos 50,000 empleos permanentes y al menos 70,000 temporales, a nivel general.

¿Dónde se cultiva café?

Según Fórum Café, el área cafetalera del país se sitúa alrededor de las 130,000 hectáreas, siendo la mayoría de la producción arábica, con variedades que incluyen típica, caturra, borbón y catuai.    

Actualmente, en el país se cultiva café en 27 provincias, estando las mayores zonas productoras en San José de Ocoa, Barahona, Santiago, La Vega, Peravia, San Cristóbal y Azua, de acuerdo con el Instituto Dominicano del Café (INDOCAFÉ).

De hecho, en la cosecha 2019/2020, a nivel general, se sembraron 1,618,058 tareas y hubo un total cosechado de 339,088 quintales, de acuerdo con esta institución, encargada de regular el sector del café en el país.

Dificultades del sector

A pesar de todo lo que representa la caficultura para el país y de que la producción nacional del café experimentó un crecimiento de 11.2% el pasado año 2020, de acuerdo con el Banco Central, la situación del sector no es la mejor.

Y es que el sector cafetalero dominicano, al igual que otras naciones de América Latina, ha sufrido continuas crisis a lo largo de la historia.

Esto debido a diferentes variables que cita el informe “Fortalecimiento de las Capacidades para la Gestión de Políticas Públicas a Organizaciones de Productores de Café a Nivel local”, realizado en 2018 por varias instituciones que encabeza el Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC):

“La baja de precio en el mercado internacional, la falta de una política de créditos flexible, el poco mantenimiento de las plantas, la reducida asistencia técnica, la falta de una cultura que rehabilite y renueve las plantaciones, además de los impactos de la broca y la roya del café”.

Entre los principales problemas generales y ambientales que tienen los cafetaleros, de acuerdo con el estudio, están:

  • Bajos precios del producto en el mercado.
  • Suelos salinizados.
  • Monopolio del mercado nacional.
  • Deforestación en zona de montaña.
  • Plantaciones dañadas por la broca y la roya.
  • Desinterés por parte de los jóvenes en la producción cafetalera.
  • Disminución de lluvia y sequías.
  • Falta de tierra y de titulación.
  • Aumento de la temperatura por la falta deforestación.
  • Falta de mercado seguro.
  • Falta de plantas que resisten a las enfermedades.
  • Empobrecimiento de los productores por las grandes pérdidas ocasionada por la enfermedad de la roya.
  • Emigración por la falta de recursos para reiniciar con las plantaciones de café.
  • Falta de conocimiento para manejar tecnología como ordenadores y medios de comunicación digital.

Frente a todas estas vicisitudes, lo que se plantea es que la producción de café en el país sea incentivada por las autoridades estatales, porque esta actividad impacta positivamente tanto el tema medioambiental como en la mejoría de la economía del país y de las familias que cultivan este producto.

Además de la gran felicidad que nos da “la bebida de los dioses” a todos nosotros, los coffeelovers.

Con este llamado al Gobierno, celebremos en grande el Día del Agricultor, que va desde el peón de la finca hasta el agroindustrial.

¡Feliz día, agricultor!